Las reglas no escritas del presupuesto II



En el último blog me he centrado en las "reglas no escritas del presupuesto. La superación de estas reglas no escritas es esencial para reducir los tiempos del ciclo presupuestario, la precisión en los pronósticos sea mejorada y el rendimiento optimizado.

Gracias a todos por vuestros comentarios y recomendaciones. La clave para superar y eliminar estas reglas “no escritas” es afrontarlas, primero admitiendo que existen y posteriormente haciendo un esfuerzo conjunto para anular su impacto. En nuestra experiencia este esfuerzo conlleva lo siguiente:

  • Enfocar el presupuesto a los resultados estratégicos. Los presupuestos generalmente están enfocados en los objetivos financieros por departamentos. Aunque estos objetivos pueden ser “estratégicos”, la realidad es que son las acciones las que ejecutan la estrategia y el rol del presupuesto debe ser asegurar que esas acciones tengan suficientes recursos. Esto significa que el diseño del presupuesto y de los procesos deben estar relacionados a las iniciativas estratégicas y al cómo estas iniciativas influirán en los objetivos a corto y largo plazo. 

Las Reglas no escritas del Proceso Presupuestario - I


Leyendo un artículo de Dean Sorensen en Strategic Finance Magazine (Integrated Rolling Forecasts) y encontré una sección que aborda las reglas no escritas del proceso presupuestario ‘Unwritten rules of budgeting’, la manera en que las personas creen que deben actuar para que el presupuesto sea un éxito. 

Estas reglas generalmente son el resultado de una serie de creencias que mantiene la mayoría de las personas dentro de una organización, que incluye: 

  • Nunca envíe el presupuesto real la primera vez y siempre infle los costes y elimine ingresos. La idea subyacente es que la asignación del presupuesto no es justa. Los presupuestos siempre serán “recortados” independientemente de si es razonable o exacto. 
  • Siempre prometa poco y entregue más de lo esperado. La idea de fondo es que las organizaciones valoran a los héroes individuales y no el trabajo en equipo.